miércoles, 13 de enero de 2010

Buena estrella.

Inspirado en "La energía de Venus" del blog Silenciosa-mente.


Es preciso tener un caos dentro de sí para poder dar a luz una estrella danzarina. Nietzsche



Mónica: hoy quiero hablar de nuestra buena estrella, la que nos hace brillar con luz propia.

Sabemos, o intuimos, que tenemos una razón de existir mas allá de la mera subsistencia, logros materiales, satisfacción de nuestros deseos y necesidades, etc…Sin embargo muchas veces deambulamos como si la existencia consistiese en esta absurda y rutinaria repetición de condicionamientos que llamamos vivir. Como bien decía Julio Cortazar.” No puede ser que estemos aquí para no ser”

Si, hoy quiero hablar de nuestra buena estrella, la que nos hace brillar con luz propia.


“El hombre nació para brillar no para la miseria” canta Caetano Veloso

.

Pero que es lo que nos impide brillar? No me refiero a tener “buena onda”, ser simpático por doquier, tener éxito, lucir sonrisas almidonadas o alguna pueril actitud “new age”. Tampoco a las pretensiones del ego de lucirse encandilando a los demás .No hablo de esa felicidad pre-fabricada que la sociedad consumista nos trata de vender tanto sea por televisión como por el sistema de adoctrinamiento que solemos llamar educación.

Me refiero al brillo genuino de la luz que surge del ser uno mismo; a ese brillo interno que lucha por exteriorizarse pero que ahogamos ya desde niños en pos de la adaptación social

Es ese el brillo que se vuelve indispensable recuperar, crear o descubrir.


Le preguntan en una entrevista a la psicóloga jungiana Marie-Louise von Franz:

-¿Por qué tan poca gente sigue su propia estrella? ¿Por qué es una carga tan pesada?


-Porque seguir la propia estrella significa aislamiento, no saber a dónde ir, tener que descubrir un camino completamente nuevo para sí mismo en vez de simplemente seguir la senda hollada que recorren todos los demás. Por eso el ser humano siempre ha tendido a proyectar la unicidad y grandeza de su ser interior sobre personalidades externas y convertirse en su siervo, su devoto servidor, admirador e imitador. Es mucho más fácil admirar a una gran personalidad o convertirse en discípulo o seguidor de un gurú o profeta religioso, o admirador de una gran personalidad pública... Todo eso es mucho más fácil que seguir la propia estrella.


Mónica: hoy quiero hablar de nuestra buena estrella, la que nos hace brillar con luz propia y como vos, quiero que la belleza guíe mis pasos.

Esa belleza, que nada tiene que ver con lo “lindo” y que al igual que la flor que nace en la basura, se impone suave pero firmemente ante la superficialidad y mediocridad reinante.


Venus, arquetipo femenino de la belleza, es también el astro más brillante después del sol y la luna y muchas veces aparece por el horizonte antes del amanecer.

Más allá de luces artificiales que enceguecen pero que no iluminan, allí despidiendo a la oscuridad esta nuestra propia estrella, esperando por nosotros, hacia un nuevo amanecer.






Buena estrella

Ya ha corrido mucha agua debajo de este puente
Me ha sobrado y me ha faltado inspiración
Puede ser que suene muy desafinado
Es que me desafina el corazón

 
Vamos hoy a levantar la copa del amigo
Necesito estar lo mas cerca que pueda de ti
Y fundirme con tu espíritu divino
Y sentir que, si, se puede ser feliz
 
Times are changing
Times are changing
Times are still changing
They are changing for me
 
A todos algo ya nos ha golpeado duro
Y vimos algo tras el velo del amor
Pero es que ya no soy tan chico ni tan puro
Que hasta me parece ingenuo el rock and roll
 
He perdido y he encontrado mi cabeza
Despertándome en el charcho de la sangre del mezcal
Con la cara un poco mas desfigurada
Ten cuidado con las mezclas y a no desanimar
 
Es genial por fin haber tocado fondo
Porque ya no se puede bajar mucho mas
Ves ese hilo de luz que está ahí arriba
Es tu buena estrella, te protegerá
 
Entonces cuando todo al fin se vuelve insoportable
Cuando el mundo y el veneno dan dolor
Todavía sigue allí tu buena estrella
Buena estrella para todos, para vos
 
Times are changing
Times are changing
Times are still changing
They are changing for me
 
Yo también jugué muy sucio
Y en eso estoy de acuerdo
Cuando hablé desde el sentido y la razón
Pero es que es que existe una ley
Nadie es perfecto vos también tendrás lo tuyo corazón
 
Nos veremos en la cárcel o en concierto
Llendo atrás de algún perfume de mujer
Ya nos vemos en el siglo veintiuno
Una buena estrella también viene con él.